¡Ta' lloviendo varo con las recargas, mi gente!
¡Quiáhuleee, chamacos! ¿A poco no se han fijado que ahora tooodos traen el cel bien recargado, como si les regalaran el saldo? Pues no es por arte de magia, sobrinos, es porque las recargas electrónicas andan pegando más que los chistes del Chavo del 8. Y si tú, que me estás leyendo, no las vendes… ¡tás dejando ir la lana como si fuera agua en la regadera del gimnasio!
¿Y qué onda con las recargas?
Antes uno iba hasta el Oxxo o a la plaza a meterle saldo al cel, como si fuera peregrinación. Pero ahora la raza quiere todo al instante, cerquita y con confianza. Y ahí es donde entras tú, con tu tiendita de la esquina, como el superhéroe de los megas.
Las recargas de tiempo aire (el famoso TAE, que no es té de tila), ya son básicas, como el bolillo pa’l susto. En México, la mayoría anda en prepago, y eso significa que a cada rato andamos buscando dónde recargar. ¡Imagínate que tus vecinos lleguen contigo pa’ meterle saldo! ¡Eso es como poner una piñata llena de clientes en tu tienda!
¿Y por qué conviene tanto?
Vámonos recio, directo al grano:
✅ Es más fácil que aprenderse las tablas del 1 ✅ Rápido como torta en recreo ✅ Seguro como abrazo de abuelita ✅ Y deja dinerito diario
Cada que haces una recarga, te cae una comisión. No es el billete de la lotería, pero chamacos… de granito en granito se hace el montón. Es como tener una minita de oro, pero sin el pico y la pala.
Y lo mejor del asunto es que no necesitas llenar tu tienda de productos que se caducan o se empolvan. ¡Nomás tu cel y una plataforma bien chula y confiable, y a darle!
Casos de la vida real, estilo "La Rosa de Guadalupe"
Les va la historia del Don Toño, allá en Puebla. El vato empezó vendiendo recargas nomás pa’ ver qué tranza… y tómenla: en su primer mes hizo más de 350 transacciones. Al siguiente le metió pago de servicios y hasta vende SIMs.
Dice que las recargas no solo le dejan su buena feria, sino que además le traen más clientela, y esa raza luego se lleva su coquita, sus papitas, y hasta la servilleta. “Es como ponerle salsita a los tacos… ¡todo sabe mejor!”, dijo, con voz de sabio.
¿Y cuál plataforma me recomiendas, Don Cheto?
Mira, yo no te voy a echar choro mareador. Allá afuera hay un chorro de plataformas, pero no todas traen con queso las quesadillas. Lo que quieres es:
Que sea rápida y no se trabe como computadora vieja
Que te deje buena comisión
Que tenga atención al cliente chida, de esas que no te dejan en visto
Que además de recargas, te ofrezca otros servicios como pago de luz, agua, y venta de SIMs
Y pa’ eso, chamacos, muchas tienditas ya están usando MTCenter, que está re-te-bueno. Ahí puedes hacer recargas, vender pines, cobrar recibos y hasta SIMs de compañías como Dalefon o Internet para el Bienestar. Todo desde tu cel y con comisión incluida. ¡Negociazo!
Tips del Don pa' levantar la venta
- Pon un cartel bien visible que diga: “¡Aquí hay recargas, jovenazo!”
Ofrécela aunque no la pidan. “¡Órale doña Mari, no quiere meterle 50 pesitos al cel pa’ que no se le acaben los megas justo cuando manda el meme?”
Arma combos. Recarga + botana = venta segura. “¡Con su recarga, llévese sus rancheritos a precio de compa!”
Si todavía no vendes recargas, este es el empujón que te faltaba. Es lana constante, es gente nueva entrando a tu tienda, y es una forma bien chula de modernizar tu changarro sin volverte loco.
Y no lo olvides: “El que no recarga… se rezaga”. Y si no lo haces tú, el vecino de la otra cuadra ya se está llevando esa lana. ¡Vámonos recio, chamacos!
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