Miren, mi gente… en esto de tener tu tiendita, saber vender es chido, pero saber comprar, ¡es la mera clave del éxito! No se me hagan los chiles de todos los moles, porque aquí entre nos, más de uno le ha dicho que sí al primer precio que les dan… ¡y zas! Les dieron con todo y sin vaselina.
No andes a ciegas, sobrino… ¡Conoce tus números!
Antes de que te llegue el proveedor todo trajeado (o en chanclas, depende), tú ya tienes que saber cuánto te cuesta lo que vendes, qué se te vende más y cuánto margen te deja. Si no, luego te salen como el Chómpiras: “¡Se me chispoteó!”
📓 Tip de su tío Don Cheto: Ten tu libretita con los precios y los productos que más jalan. Así, cuando te quieran ver la cara, tú nomás sonríes como el Chapulín: “Lo sospeché desde un principio…”
Al primer precio, dile: ¡Pos ora no, joven!
Cuando te suelten la lista de precios, tú no digas que sí como robotito, ¡pregunta, hijo! ¿No hay precio de mayoreo? ¿No tienen promoción del mes? ¿No hay unos con la caducidad cerquita que te dejen más baratitos?
🎯 Pro tip: Muchas veces traen productos nuevos con promos y hasta regalitos pa’ exhibir. Tú nomás pregunta… y si te dicen que no, les sueltas un “¡Y ahora, ¿quién podrá ayudarme?!”
Jálate con otros tenderos pa’ hacer bola
¿Tienes cuates en la colonia que también tienen tiendita? ¡Únanse como los Avengers de las abarroterías! Compren juntos pa’ que les den mejor precio. Como decía el buen Cantinflas: “¡Ahí está el detalle!”
💡 Tipazo: Si hacen compra en bola, hasta les mandan el camión completito y con sonrisa incluida.
No solo el precio, mi chavo… ¡todo se negocia!
No seas tímido como el Popis. Además del precio, pide que te den el reparto temprano, que si te pueden cambiar lo que no se vende, que si traen carteles chidos o hasta un refri prestado. ¡Tú pídele a la vida… y al proveedor también!
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¡No te cases con uno solo, ¡ni que fuera tu crush de secundaria!
Está bien tener tu proveedor de confianza, pero si ves que ya se está manchando con los precios, búscale otros. Así como en el amor, hay que tener plan B… o C. ¡Ponte vivo!
📞 Cotiza, compadre. Haz como el Dr. Chapatín: “Yo traigo otros datos.”
Ya estuvo bueno, ¿no? Negociar no es ser codo, es ser chingón. Aquí el que no habla, no vende. Así que, mi gente, agárrense los pantalones, saquen el colmillo y pónganse al tiro con los proveedores.
¿Ya te aplicaste alguna de estas? Cuéntame, que aquí todos somos familia. Y si no sabías esto, ¡pos ya lo sabes, sobrino!
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